Cuando el célebre compositor Johann Sebastian Mastropiero se sentó al piano dispuesto a componer una canción ovalada... una canción o balada sobre los versos del poema "A la Playa con Mariana", le pareció ver la silueta de un extraño animal meneándose en la ventana de su estudio. Un poco asustado llamó a su mayordomo... je, con el mayordomo de Mastropiero hay una historia muy interesante... claro, era un corpulento galés que había trabajado en las minas de carbón de la Thomson & Company hasta poco antes de la misteriosa desaparición de uno de los socios de la Thomson & Company... Henry Company. Sí, parece que había tenido problemas de dinero, que había apostado una fuerte cantidad en el condado de Cowthumb, en sus tristemente célebres carreras de vacas, que se hacían ahí... en Cowthumb. Hablando de Cowthumb, en las granjas de las afueras es donde se fabrica el famoso "queso agrio de vaca perdedora"... no, no, muy valorado por los sibaritas franceses, por ejemplo el marqués d’Hiver, que usa estos quesos para hacer su soufflé, el soufflé d’Hiver... de queso, ¿no? Hablando de soufflé, les voy a dar la receta... no, no se rían que después les sale aplastado y no saben por qué. Un secretito para que el soufflé les salga: hay que poner la harina con las yemas en un recipiente más bien grande, y eso hay que dejarlo ventilar tres días y tres noches... pero con la mirada fija en la mezcla. Y después, unos instantes antes de servirlo se lo pone en presencia de un frasco de ajos de Bulgaria... herméticamente cerrado... sí, porque si no el soufflé toma el gusto de los ajos. La gente siempre me pregunta por qué los ajos tienen que ser de Bulgaria... Bulgaria... Bulgaria es un país. Hablando de Bulgaria... una cosa que a mí siempre me ha llamado la atención, es que en Bulgaria las mujeres se llaman por ejemplo Nadieschda, Svoboda, Dobrinka... ¡y la capital se llama Sofía! No, idea de los búlgaros, yo no tuve nada que ver... sí, no, no, en este caso yo soy un simple reproductor... un simple repetidor, digamos... esto trae a mi mente a la duquesa Sofía Von Stauben, abnegada protectora y amante de Mastropiero... digo para no perder el hilo, ¿no? Sí, porque hay muchos que se van por las ramas...
No, no me he vuelto loco. Bueno, sí, lo estoy, pero no tiene nada que ver con lo arriba expuesto. Se trata de la introducción de una obra de mis argentinos favoritos: Les Luthiers.
Para quien no los conozca, se trata de un grupo de argentinos que aúnan humor y música en todos sus espectáculos. Inspirados por un compositor imaginario, Johann Sebastian Mastropiero, cada representación de Les Luthiers se convierte en un banquete de humor inteligentísimo, con el que te ríes de verdad y a gusto.
Fundado por Gerardo Masana (en paz descanse) allá por el año 1967, el grupo se ha mantenido al pie del cañón hasta nuestros días. Marcos Mundstock, Carlos Nuñez Cortés, Jorge Maronna, Carlos López Puccio y Daniel Rabinovich (además del ex-intregrante Ernesto Acher) forman el bien llamado Conjunto de Instrumentos Informales Les Luthiers. Tal nombre se debe a la marca de la casa más famosa del grupo: los instrumentos "raros", como los llama la mayoría de la gente. Y la verdad es que viendo estos ejemplos...
... cuesta imaginar no ya que funcionen, sino que suenen perfectamente, algo que deben a los "luthiers de les luthiers", Carlos Iraldi y Hugo Domínguez. Los intrumentos que he mostrado son, de arriba a abajo: Latín o Violín de Lata, Ferrocalíope, Bajo Barríltono, Gaita de Cámara y Desafinaducha.
Les Luthiers son maestros de los juegos de palabras, tienen unas voces increíbles y tocan como auténticos virtuosos (sean instrumentos informales o convencionales). Llevan ya casi 40 años recorriendo el mundo regalándonos su inigualable sentido del humor, siempre elegante y capaz de hacernos saltar lágrimas de risa. Os recomiendo sus DVDs, especialmente los de los espectáculos Mastropiero que Nunca y Bromato de Armonio.
En noviembre vuelven a Barcelona (y luego a Zaragoza, si no me equivoco) con un espectáculo antológico de toda su carrera: Las Obras de Ayer (El Refrito), cuyo título muestra otro más de sus geniales juegos de palabras. Si podéis ir, no lo penséis dos veces y disfrutad del espectáculo. ;O)
Todas las imágenes las he sacado de esta web: Los Luthiers de la Web. Os la recomiendo mucho, tanto si ya conocíais el grupo como si no. Está cargada hasta los topes de muchas anécdotas y curiosidades insólitas.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
A mí con eso de los juegos de palabras me han convencido =P
No sabia que te gustaran Les Luthiers. Saludos desde Francia!!
Publicar un comentario