21.12.04

¡Feliz Dadiván!

He tenido una idea revolucionaria.

Una de esas ideas que cambian el mundo.

Una revelación mística de grandes proporciones, me atrevería a decir.

Me explicaré: cada año, por motivos desconocidos para mí, odio más la navidad. De hecho, cada año conozco a más gente que se encuentra en la misma situación que yo.

Las causas de este aumento generalizado del odio a las fiestas navideñas, pueden ser muchas y muy variadas:
- Consumismo incontrolable.
- Ñoñería hasta en el lavabo.
- Tradiciones estúpidas.
- Nuevas tradiciones aún más estúpidas.
- Anuncios de juguetes que hacen crujir los dientes.
- Anuncios de perfumes que le hacen a uno pensar si existe vida inteligente sobre la faz de la Tierra.
- Reuniones con la familia, incluyendo decenas de parientes que te suenan de algo, pero no tienes ni idea de cómo se llaman y a los que no vuelves a ver en todo el año.
- Un barbudo de barriga cervecera y pinta de pedófilo le trae regalos a los niños.
- En pleno siglo XXI, aún hay gente que canta villancicos sin morirse de vergüenza.
- Pasan películas que nos recuerdan una y otra vez la importancia del espíritu navideño, elevando los niveles de azúcar hasta límites vomitivos.
- Surge la duda de si vale la pena gastarse tanto dinero, para celebrar el nacimiento de un tipo que se pasó la vida predicando la austeridad.
- Surge también la duda de si vale la pena haber fundado una religión basada en las enseñanzas de un tipo que nunca quiso fundar una. En consecuencia, uno vuelve a preguntarse lo de la vida inteligente, y lo traslada a los últimos 2000 años.
- Hay Guerras, hambre, epidemias, represión, intolerancia y miseria por todo el globo terráqueo, y aquí todos pasándolo bien.

Prefiero pensar que la humanidad se vuelve lista a medida que avanza la evolución, y no al revés. Por lo tanto, deduzco que, en un momento indeterminado del futuro, el número de gente que odiará la navidad será superior al de la gente que aún la celebre. Y si hay más gente que la odia, acabará desapareciendo.

Basándome en lo expuesto, llego fácilmente a la única conclusión lógica.

Hay que inventar una fiesta nueva.

Hay que inventar el Dadiván. La navidad al revés.

No al revés en un sentido estricto. Más bien puesta patas arriba. Rota en mil pedazos y vuelta a construir, cambiando formas y añadiendo otras nuevas.

¿Y cómo se celebra el Dadiván?

Esa es la parte más divertida. No hay UN Dadiván. Hay muchos. Muchísimos. Tantos como personas hay en el mundo.

El Dadiván se celebra como uno quiere. Depende de lo que cada persona desee. De cómo se sienta más a gusto. Puede ser:
- Con la familia (los que conoces, claro).
- Con tus amigos, riendo toda la noche.
- Viendo la tele.
- Escribiendo.
- Haciendo algo útil, para variar.
- Achuchando a tu novia/o.
- Asistiendo a alguna maratón cinematográfica.
- Donando dinero o juguetes, si te sientes realmente solidario.
- Cantando en un karaoke.
- Descansando, sólo o acompañado.
O muchísimas otras opciones. Las posibilidades son infinitas.

El Dadiván te permite elegir. Te deja ser feliz a tu manera.

Es la fiesta del futuro. Que no os engañen. ;O)

12.12.04

La Leyenda de Cameron Duncan

Tengo en mi poder, desde el jueves pasado, la esperadísima (al menos por mí) edición extendida del Retorno del Rey, a la que se añaden 48 minutos respecto a la versión cinematográfica. A estas alturas ya he visto tanto la película, como los enormes documentales de los dos discos de extras.

Y es sobre uno de estos extras sobre lo que voy a hablar, no sobre la película.

Con el título de Cameron Duncan: La Inspiración para Into the West, se nos presenta un documental tremendamente emotivo, que se aparta del mundo del Señor de los Anillos para descubrirnos a un joven neozelandés, Cameron Duncan, que se hizo muy amigo de Peter Jackson y de muchos otros miembros del equipo de producción de ESDLA, como Fran Walsh.

Cameron Duncan era un joven cineasta. Ya hacía cortometrajes desde muy pequeño, especialmente sobre batallas campales, un hecho que hizo que le cayera muy simpático a Peter Jackson, ya que él comenzó haciendo cosas muy parecidas (aunque Duncan llegó a inventar fórmulas de explosivos exclusivamente para sus películas).

A los 16 años le diagnosticaron un cáncer en la pierna, que le obligó a abandonar su deporte favorito, el Softball. No se rindió, y rodó un demoledor corto sobre su experiencia, bajo el extraño título de DFK6498. Durante un tiempo, pareció que había logrado superarlo. Sin embargo, tiempo después le diagnosticaron un nuevo cáncer, esta vez de pulmón. Y por desgracia, en fase terminal.

Cameron Duncan iba a morir muy pronto. Y él lo sabía. Pero ni corto ni perezoso, a dos meses de su muerte, rodó un nuevo cortometraje: Strike Zone. Si he calificado DFK6498 como "demoledor", Strike Zone debería ser una lección básica y obligatoria para todos aquellos que quieren hacer cine. No puedo deciros ni el argumento ni por qué creo que es tan jodidamente bueno, pues creo que es una obra de arte, un testamento que vale la pena disfrutar en toda su plenitud, más teniendo en cuenta las circunstancias en las que fue realizado, con días de rodaje en los que tenía que parar porque le había aparecido un nuevo agujero en el pulmón.

Ahora ya no está entre los vivos. Murió poco antes del estreno del Retorno del Rey. Nos ha dejado una gigantesca joven promesa, un cineasta que desbordaba talento por las orejas. Un chico de 20 años que podía dar lecciones a muchas grandes estrellas de Hollywood. En la edición extendida de ERDR, Peter Jackson ha hecho algo que le honra como persona: hacer que perdure para siempre el recuerdo de Cameron Duncan, cuya muerte inspiró a Fran Walsh para escribir Into the West, la canción con la que cierra la película, interpretada por Annie Lennox. Muy apropiada. Una canción que habla sobre la visión que tenía Tolkien de la muerte.

Qué grande podría haber sido.

Pero el tiempo que vivió, lo fue. Realmente lo fue.

Descansa en paz, Cameron.

2.12.04

Increíble-ble

Ayer cayó la última producción de Pixar hasta la fecha: Los Increíbles, dirigida por Brad Bird, artífice de esa GRAN desconocida que es El Gigante de Hierro.




Ambas películas tienen algo en común: la afición de Brad Bird por los años 50-60, y toda la estética y cultura popular de entonces. Y eso incluye, cómo no, a los robots gigantes. Pero así como en El Gigante de Hierro la historia iba entorno a un robot heróico, los que aparecen en Los Increíbles son una auténtica encarnación del mal. Aunque no tanto como su artífice, el villano de esta película: Síndrome.

La cinta nos presenta a Bob Parr, la personalidad pública del (en el particular universo de esta película) superhéroe más grande que ha existido jamás: Mr. Increíble. Por una serie de acontecimientos que ocurren en el prólogo, y que por diversas razones prefiero no desvelar, tanto él como su mujer (otra de las grandes, Elastigirl) acaban "colgando los trajes" y retirándose durante 15 años, tiempo en el que nacen sus tres hijos: Violeta, Dash y el bebé... que ahora no recuerdo cómo se llamaba. Perdón. ^___^

Prefiero no seguir contando nada de la trama. La película merecer ser disfrutada de principio a fin, con todos sus giros y sus guiños (como el de las capas de los superhéroes, que es impagable), que no son pocos. Baste decir que Los Increíbles es, sin exagerar nada, posiblemente la mejor película de superhéroes desde el Batman de Tim Burton. Brad Bird y John Lasseter (el jefazo de Pixar y director de las anteriores películas, que aquí sólo produce), han formado un dúo aplastante. Dos grandes genios de la animación se han unido y el resultado no sólo está a la altura de lo esperado, sino que supera cualquier expectación. Acción a raudales, personajes más humanos que nunca (en todos los sentidos), referencias frikis por un tubo (otro ejemplo: Violeta lleva el pelo como Sadako, la niña de The Ring), una trama sencilla pero llevada con maestría... y por encima de todo, la sensación que nos dejan Bird y Lasseter de que para ellos, los niños NO SON TONTOS.

Los Increíbles es increíble-ble. Ya tardáis en verla.

22.11.04

Fin de Semana de Cine

Este fin de semana he ido al cine en dos ocasiones.

La primera fue el viernes por la tarde (¿puede considerarse ya como "fin de semana"?). Como no podía ser de otra manera, fui a ver una película que en Hollywood proyectando rodar más de 15 años, y que ahora por fin se había hecho realidad: nada menos que Alien vs. Predator.



No nos engañemos:
- No es una gran película.
- El guión es más simple que caminar.
- Los humanos son puros estereotipos sin personalidad alguna.
- La sensación de estar viendo un videojuego (muy comprensible, considerando que el director es el de la peli de Resident Evil) es constante a lo largo de todo el metraje.

Pero así a ojo, no sabría sacarle más "contras". Lo cierto es que, a pesar de la simpleza del argumento, la película está francamente bien rodada. No destila la atmósfera terrorífica y agobiante de Alien 1, 3 y 4, sino que tira más bien hacia la acción y el clima oscuro y trepidante de la segunda entrega; acción que queda remarcada con el escenario, una pirámide oculta bajo el hielo de la Antártida, que cambia de forma cada 10 minutos para que los Predators encuentren más "divertida" la cacería.

Las referencias a ambas sagas de monstruos espaciales son abundantes, por lógica. La más remarcable es la presencia del jefe de la expedición, el actor Lance Henriksen, más conocido por los fans de la saga de Alien como el androide Bishop... a pesar de que aquí interpreta un papel distinto, y posiblemente se trate de un antepasado del diseñador de Bishop, pues la acción de Alien vs. Predator transcurre en el presente.

Algunas imágenes son verdaderamente impactantes, como el despertar de la Reina Alien, al comienzo, en un homenaje bastante obvio al nacimiento del monstruo de Frankenstein. O el primer combate entre un Predator y un Alien, con victoria de... eh, no os voy a chafar la sorpresa ;O).

Pero en cuanto a la victoria final... sinceramente, no soy capaz de responder a los que no han visto la película y me preguntan "¿Oye, ¿y quién gana?". Si, tal como acaba la película podría decirse que ganan unos. Pero entonces aparece el último plano, la imagen final del film y... ¡otia, ganan los otros! O no... o si... no, espera... un final muy ambiguo, efectivamente. Aunque ese plano final es, con toda seguridad, la respuesta a una pregunta que se ha hecho alguna vez cualquier friki de ambas sagas.

En definitiva: película simple, sin ninguna pretensión de ser una obra maestra, pero que cumple las expectativas. Un 7 sobre 10.

La segunda película la vi ayer, domingo, con mi hermano. Se trata del último film estrenado por Álex de la Iglesia, titulado Crimen Ferpecto.



La historia trata sobre un tal Rafael (Guillermo Toledo), un hombre que ha nacido para vender. Un monstruo, como bien lo definen en varias ocasiones, de los grandes almacenes. Trabaja en la sección de moda femenina, donde al parecer ha logrado seducir a todas y cada una de las dependientas... excepto a una.

Rafael está obsesionado con ser jefe de planta. Cuando Don Antonio (Luis Varela), su principal competidor, le quita el puesto de una manera humillante, este acaba muerto (decidid vosotros si es un "accidente" o no). Pero hay una persona dispuesta a ayudar a Rafael a encubrir el crimen. Esa única dependienta con la que no se ha acostado, por ser la más fea de la planta. La única que lo sabe TODO. Lourdes, interpretada por Mónica Cervera.

Ella tiene las cosas claras. Ama desesperadamente a Rafael. Está obsesionado con él desde hace diez años. Por lo tanto, para seguir guardándole el secreto, Rafael debe acceder a ser su pareja, o Lourdes se lo contará todo a la policía.

Álex de la Iglesia vuelve a regalarnos un espectáculo de humor negro, similar a La Comunidad en el sentido de que nos muestra seres perfectamente normales, que se ven sometidos a situaciones extremas en las que sacan lo peor de si mismos. Aunque en el caso de Rafael, bien podría decirse que sufre lo contrario: él no quiere ser normal.

Escenas como la cena en casa de la familia de Lourdes (con esa impagable frase de la niña, que soy incapaz de reproducir aquí), o las visiones paranormales de Rafael (especialmente el fantasma), son detalles marca de la casa del director. No es su mejor película, pero si es muy, muy buena. Un 8'5 sobre 10.

Y el sábado en el periódico vi un cartel genial de Crimen Ferpecto, que si me funcionara el escáner habría puesto aquí. Era el cartel de Alien vs. Predator que véis más arriba, pero cambiando los bichos por Rafael y Lourdes. Brutal.

4.11.04

VOTAR A BUSH y otras formas de ser un completo imbécil

Ni el paro.

Ni el inexistente respeto por la naturaleza.

Ni un sistema sanitario de opereta.

Ni el hecho de pasarse el Protocolo de Kyoto por el puto culo, restregándoselo con pasión.

Ni gobernar con esa misma parte de su anatomía.

Ni demostrar en mil y una ocasiones que su incultura alcanza niveles insultantes.

Ni ignorar que existe algo más allá de sus fronteras.

Ni decir que la mayoría de las importaciones vienen de fuera del país.

Ni saber hablar inglés.

Ni Michael Moore y su larga campaña para desprestigiarle.

Ni Bruces Springsteen y todos los cantantes que se unen en su contra.

Ni los actores que salen en los Oscars y se meten con él, arriesgando su continuidad en la industria de Hollywood.

Ni dos guerras inútiles.

Ni miles de muertes absurdas en batalla.

Ni el mundo entero manifestándose en su contra.

Nada.

NADA.

Bush ha sido reelegido. El pueblo americano ha decidido. Han votado al que consideran el mejor "hombre" (en realidad sospecho que es el eslabón perdido) para liderar, no sólo su país, sino el mundo entero.

Porque va a LIDERAR el mundo, señoras y señores. Ahora sabe más que nunca que cuenta con el apoyo del pueblo. Es como si le hubieran dado un cheque en blanco para gastárselo en la forma que considere más divertida de destruir el planeta. Va a ser un líder... un líder militar, porque convertirá la Tierra en su campo de batalla particular. La veda del terrorista. Y si hay que bombardear unos cuantos países donde ni hay terroristas, ni hay armas de destrucción masiva, pues se hace. Qué cojones.

No, digo mal. Él no hará una mierda. Lo harán sus secretarios. Bush no sabría liderar el mundo ni aunque se lo explicara Supercoco.

Michael Moore debe estar dándose cabezazos contra la pared.

Puto Bush.

Putos americanos que votan a Bush.

Puto mundo.

Continuará en el año 2008...

15.10.04

Hay un mono moviendo la cámara

Voy a hablar de cine otra vez.

Voy a hablar de Roland Emmerich.

Pongámonos en situación: Roland Emmerich es el director de super-mega-ultraproducciones hollywoodienses del calibre de Soldado Universal, Stargate, Independence Day y el Godzilla yanqui.



Si, ya sé que he dicho que iba a hablar de CINE. Un poco de paciencia, por favor.

Desde hace unos cuantos años, una extraña generación mutante de directores ha invadido las salas de cine. Uno de los primeros (si no el primero) en desatar esta plaga fue Michael Bay, director de La Roca, Armagedón, Pearl Harbor y las dos entregas de Bad Boys.



Insisto, tened paciencia.

Michael Bay ha desarrollado un estilo bastante peculiar. Probablemente hace tiempo se sentó a pensar y dedujo algo parecido a esto: "Coño, si el cine es imagen en movimiento y la acción es MUCHO movimiento... ¡sólo tengo que mover la cámara como un poseso y crearé una obra maestra!". Probablemente fue durante el rodaje de La Roca, cuando la policía persigue a Sean Connery por las calles de San Francisco. Las escenas de acción, que hasta ese momento de la historia del cine MOLABAN y hacían que te quedaras clavado en el asiento, empezaron a convertirse en la más rentable fuente de ingresos de los fabricantes de aspirinas.

De repente ya no importaba la emoción. Ni que los efectos especiales no estuvieran currados. Ni que se vieran los píxeles a kilómetros. Ni que no se entendiera quién era quién, qué estaba haciendo, dónde estaba o a qué parte de la pantalla se suponía que había que mirar, pues con un tembleque digno de un terremoto de magnitud 8, tarde o temprano el personaje TENÍA que aparecer. Más movido que una foto tomada desde un tiovivo al máximo de revoluciones, pero aparecía.



Lo único importante, hijos míos, era el MOVIMIENTO. Y cuanto más mejor.

Tras Michael Bay, otros directores han tomado ejemplo. ¿Habéis visto Las Crónicas de Riddick? Las escenas de lucha son un dolor. Un auténtico y jodido dolor en el cerebro. Una estupenda forma de cargarse una buena película. Y lo mismo digo de la acción de Daredevil. O de El Mito de Bourne, según me han contado. Incluso en ciertas escenas del Señor de los Anillos, Peter Jackson enloquece, aunque sin llegar a las insuperables cotas de demencia de Riddick.



Seguro que me dejo más. No importa. Michael Bay ha creado escuela. Una escuela de monos esquizofrénicos que mueven la cámara como si les fuera la vida en ello.

Sin embargo...

Hace un par de días vi El Día de Mañana, última película de Roland Emmerich estrenada hasta la fecha. Me di cuenta de algo que me había pasado completamente desaparcibido sobre el estilo de este hombre.



Más allá de los guiones poco trabajados. Por encima del poco interés argumental. Superando los tópicos permanentes...

... Roland Emmerich SABE dirigir cine de acción.

Aluciné con Stargate. También con Independence Day. Incluso con el Godzilla americano, a pesar de ser un sacrilegio absoluto. Aluciné, señoras y señores, porque las escenas de acción eran BUENAS. Estaban BIEN rodadas. Los efectos especiales habían sido creados con sumo detalle y aplicados con maestría. Y El Día de Mañana no es una excepción.

Escenas como la primera puesta en marcha de la puerta en Stargate, el contraataque aéreo a la gigantesca nave alienígena en Independence Day, el dragón de komodo mutante persiguiendo a los héroes por las calles de Nueva York en Godzilla... y esa carrera desesperada de los chicos en el clímax del Día de Mañana, para llegar sanos y salvos a la biblioteca antes de quedar convertidos en carámbanos.

Roland Emmerich es un MAESTRO rodando escenas de acción, así como aplicando esos impresionantes efectos especiales. Roland NO pone un mono detrás de la cámara para que la mueva. A pesar de unas historias cada vez más vacías, que son el único inconveniente que le veo y que espero que rectifique, Roland me parece un grandísimo director. Porque sabe entretener, sabe emocionar, sabe cómo hacer que claves la vista en la pantalla... y lo más importante: lo sabe hacer BIEN.

Y eso, damas y caballeros, no puede hacerlo cualquiera.

Hala, ya podéis empezar a lapidarme.

10.10.04

Club Para No Dormir

No he podido escribir esto hasta hoy, domingo, debido a una semana realmente agotadora.

En la tele hemos estrenado un nuevo programa que substituye a Interferències en esa franja horaria: Club d'Amics (Club de Amigos, para los que no sepan catalán). Es el programa más largo de todos los que emitimos actualmente, llegando a las 2 horas y media (23:30 a 2:00), de lunes a viernes. En esencia recuerda un poco al Peti Qui Peti: es un magazín nocturno presentado por una pareja (en esta ocasión, son Robert Mayor y Estefanía Sainz), que leen los mensajes SMS que envía la audiencia y contestan las llamadas telefónicas. Pero aquí el objetivo es que la gente se conozca. Por eso, una gran parte de los mensajes son de tipo "ligoteo". Aquí, a diferencia de muchos otros programas, se leen y se comentan todos los mensajes (razón por la cual casi nadie se pasa de listo). También pueden pedir que emitamos un videoclip (nos piden menos de los que pensáis), algo que siempre cumplimos lo antes posible. Y si no, también se puede enviar un saludo a los presentadores, o incluso enviar poesías.

Si, poesías. De hecho, en esta primera semana ha habido una especie de batalla de poetas.

Pero lo que realmente hace destacar el programa, es que es un "Club" en toda regla. Quien quiera puede apuntarse (totalmente gratis, of course) por SMS; de ese modo podrá participar en todos nuestros sorteos y, gracias a un carnet que empezaremos a distribuir a partir de esta segunda semana, conseguirá descuentos, entradas para el cine... y mucho más. Ya tenemos 45 socios en una sola semana. :O)

Otro tema del que quería hablar, también relacionado con TV Comtal...

Ayer empezamos a emitir una serie MÍTICA de la televisión. Nada más y nada menos que Historias Para No Dormir. El capítulo que emitían, cuyo título no recuerdo, explicaba la invasión de unos alienígenas en nuestro planeta, desde el punto de vista de un científico que lo había visto venir desde dos semanas antes (estaba montado en flashback). La historia era como una mezcla entre La Guerra de los Mundos, Los Invasores y Los Inmortales. Fue genial también ver a un Chicho irreconocible, sin barba y jovencísimo, presentando y cerrando los capítulos (la historia estaba partida en 2), al más puro estilo Hitchcock.

Viendo el capítulo reflexioné y pensé cómo sería esa misma historia si la volvieran a rodar (también en España), hoy en día.

Me eché a reir. Sería ridícula.

Ni los actores, ni los recursos, ni siquiera el guión. Ha habido un retroceso escandaloso en la calidad de los tres. Veo Historias Para No Dormir y ME CREO a los actores que aparecen. Veo cualquier serie española que emiten a mediodía, y sólo me producen náuseas. ¿Qué coño ha pasado?

Necesitamos un nuevo Chicho que ponga las cosas en su sitio. Urgentemente, a poder ser. Antes de que la telebasura acabe de lobotomizar a la juventud. Bueno, y a los no tan jóvenes...

4.10.04

Show me the money!

Hoy he tenido reunión con el jefe.

Me gustaría poder decir que me han dado un aumento de sueldo, pero no es así.

Un aumento es cuando te pagan más por hacer el mismo trabajo de siempre. El problema es que yo ya estaba trabajando el doble de lo acordado en el contrato inicial, cobrando lo mismo. Pero esta tarde hemos regularizado ese "pequeño" detalle.

Ahora cobro lo que merezco. Sin más.

Pero me pregunto... ¿cuánta gente debe haber sin esa suerte? ¿Cuántos/as empleados/as sobreviven con miserias mientras se parten el alma trabajando? ¿Cuántos jefes codiciosos tiranizan así a sus empleados, exprimiéndoles hasta la última gota de su paciencia?

Debería haber más jefes "humanos". Me alegro por mi suerte, pero mi forma de ser me obliga a preguntarme por qué esa suerte no se reparte un poco más.

26.9.04

Frikis al cuadrado

Este es un tema de actualidad, y sobre el que he estado pensando últimamente: la edición en DVD de la trilogía clásica de Star Wars.

Lo que muchos temían es cierto: tal como podéis ver en el enlace de arriba, George Lucas ha hecho nuevos cambios, que se añaden a los ya realizados en el 97, cuando se estrenó en cines la Edición Especial de la trilogía. Los motivos que da son, básicamente, que las películas son suyas, que puede hacer con ellas lo que quiera, y que las ve con los ojos de un artista que siempre intenta perfeccionar su obra.

Motivos económicos aparte, y aún a riesgo de morir lapidado por una turba enfurecida de fans, opino que el señor Lucas está en su derecho. La película es suya. El universo Star Wars es suyo. Y si dentro de unos años le da por substituir los ewoks por wookies, no leeréis ni oiréis una sola queja mía.

Hay gente que se toma esto demasiado en serio. Gente que ha crecido viendo las películas tal como se estrenaron originalmente, sin cambios añadidos.

Gente, en definitiva, como yo.

Yo también adoro la trilogía. Pero... ¿por qué yo no le doy importancia a esos cambios? ¿Acaso, sin que me haya dado cuenta, ya no soy un gran fan de Star Wars? ¿No soy una persona que adora el cine? ¿No me gustaron nunca las versiones originales? ¡Pues claro que me gustaron!

No comprendo a los que acusan de "frikis" a los completistas que quieren todas las versiones. No comprendo que también odien a George Lucas por hacerlo. Y no lo comprendo, señoras y señores, porque se han convertido precisamente en lo que critican: unos frikis. Y además intransigentes. Incapaces de ver su adorada obra de una forma que no sea la inmaculada versión original. "Esto no necesita ningún cambio, está bien como está", dicen. ¿Y qué? ¿Y si el director y AUTOR de la obra considera oportuno cambiar algo? ¿Son imaginaciones mías, o es que realmente intentan decir que saben más de Star Wars que George Lucas?

Lo que más enfurece a esta gente, es que ahora Hayden Christensen aparezca al final del Retorno del Jedi como el fantasma de Anakin, substituyendo al actor que aparecía antes, Sebastian Shaw. Es como una herejía para ellos. No soportan la nueva trilogía. La califican de infame, o peor, de traición al espíritu de Star Wars. Señores, voy a dejar algo claro: ESTO ES STAR WARS. Las viejas y las nuevas películas. TODAS. Sin excepción. El señor Lucas es libre de conectar ambas trilogías como le salga de sus pelotas. Luego cada uno decide si le gusta o no, si la considera buena o mala, pero no le da un berrinche y dice que es una herejía, como si de un fanático religioso se tratara. ¿Ahora hay que estrellar dos aviones en el Skywalker Ranch?

Frikis al cuadrado. Eso es lo que son.

Tendrán sus adoradas versiones originales, eso seguro. Es la ventaja de Star Wars. Hay versiones para todos.

Incluso para los más intolerantes.

14.9.04

Horror & Preview

A petición de Danfan, he aquí mi famoso Velocirraptor. Si hijos míos, por culpa de esta chorrisandez, me dieron un programa propio... XD



Y una sorpresilla. Aquí tenéis un pequeño avance de lo que será Dork Dungeons V, actualmente "in production". ;O)



Añadir sólo que el estreno ayer de Interferències fue un éxito absoluto de participación por parte de la audiencia. Muchas gracias a todos/as. ^___^

11.9.04

Permanezca en Sintonía

He pasado una semanita complicada. Por eso no escribía aquí.

En Televisió Comtal estamos pasando un breve periodo de transición entre la programación de la pasada temporada, y la de la nueva. Se preparan programas nuevos, y el plato fuerte llegará este mismo lunes con Interferencias, una apuesta muy innovadora: se trata de una guerra entre 2 programas, que lucharán por tener el control total del espacio horario entre las 0:00 y las 2:00, de lunes a viernes. Ya veremos qué programa sobrevive al final de la temporada... :OP

Y hoy vuelve el juego de rol al Chat del Velocirraptor. Esta temporada promete ser una carnice... er... una aventura emocionante. 0:O) ¡Y con regalos!

Bueno, eso es todo de momento. Ya iré informando de más novedades. :O)

2.9.04

Ride the Lightning

Menudo tormentón cayó ayer por la noche. Juro que los rayos eran tan fuertes y caían tan cerca, que parecía como si estuvieran bombardeando la ciudad. Sonaban como explosiones.

Me atrevería a decir que nunca antes había "escuchado" una tormenta de semejante intensidad.

Desde mi ventana sólo podía ver caer agua y más agua, pues el edificio de enfrente impide que vea el cielo. Y es una pena, ya que el mismo día, por la tarde, acababa de estrenar gafas nuevas 8O), y habría sido una estupenda oportunidad para ponerlas a prueba, mirando cómo caían los rayos. Sigo siendo igual de miope que antes, pero ahora además me han detectado astigmatismo...

A este paso acabaré también daltónico. 8OP

31.8.04

La Primera Vez

Suelo alternar largas épocas de escasez de ideas, con breves periodos de inspiración en los que no puedo parar de escribir. Cuando ocurre lo segundo, lo que salga depende siempre de mi estado de ánimo...

... y como estoy como un cencerro, eso explica por qué escribo tantas cosas diferentes. :OÞ

Un ejemplo de lo que hago cuando surge la vena cómica (o en este caso, la vena paródica), es esta tira que escribí hace un tiempo, y que me dibujó Kraken. Muestra a Adrik y Dondepre, los autores de Fanhunter: La Batalla de Montjuïc, protagonizando una curiosa versión de cierto anuncio que estuvo de moda hasta hace unos meses.

Todo parecido con la realidad es... muy probable ;O)

Espero que os guste.

30.8.04

Big Bang

Damas y caballeros, aquí y ahora comienza una nueva etapa...

...

Joder, qué dramático. :OP

Bienvenidos todos a mi blog. Me había resistido bastante a tener uno, pero al final ni yo he logrado escapar de sus garras... ¡aaaargh!

Un aviso: el antiguo Vórtice aún lo tengo en mi ordenador, bien archivadito. La razón por la que lo he transformado en este blog, es porque ya no escribía ni diox. Si alguno de los antiguos miembros del Vórtice (versión 1.0, jeje) quiere recuperar sus antiguos textos, que me lo diga y se los enviaré ipso facto.

Nada más... de momento. ^_^